El drywall es una placa de yeso o fibrocemento utilizada para la construcción. Se considera antisísmico, pues no le aparecen rajas ni fisuras en un periodo de vida útil de 40 a 50 años.
Es un material de construcción que se utiliza para crear paredes, techos y otros elementos decorativos en el interior de las viviendas. El drywall está compuesto por placas de yeso laminado que se fijan a una estructura de madera o metal. Este material tiene varias ventajas, como su rapidez de instalación, su versatilidad de diseño, su resistencia al fuego y la humedad, y su capacidad de aislamiento térmico y acústico.
El drywall se puede utilizar para crear diferentes tipos de decoraciones, como falsos techos, bóvedas, columnas, repisas, nichos, etc. También se puede combinar con otros materiales, como el PVC, la madera o el vidrio. El drywall permite incorporar iluminación indirecta o empotrada, lo que crea efectos visuales muy atractivos. Además, el drywall se puede pintar o revestir con papel tapiz, vinilos o telas.
